

La ausencia de Chile en la lista de los países que debían firmar el Acuerdo de Escazú tiene en entredicho las políticas de Sebastian Piñera, luego que fuera su primer gobierno, de 2012, el promotor e impulsor de la iniciativa.
Señala una fuente ligada al Ministerio del Medio Ambiente (@MMAChile): “La decisión de no firmar el Acuerdo de Escazú pasó por una decisión política y no técnica del asunto y en eso tiene mucho que ver Benjamín Salas”.


“Escazú contaba con la aprobación de la ministra del Medio Ambiente @CarolaSchmidtZ, a partir de esa decisión fue relegada a un plano decorativo y secundario que se puede refrendar con la declaración del pasado martes”.


La figura de Salas Kantor no es nueva en lo que concierne al mundo de la cancillería. @ELmercurio_cl daba cuenta del papel preponderante que tiene el asesor, hijo de la exministra Pauline Kantor, en todo lo relacionado con política exterior del @GobiernodeChile.


El abogado de la @UCatolica fue el promotor de la visita de Piñera a Cúcuta en febrero de 2019, como también de otras acciones desafortunadas como la bandera chilena inserta en la de EEUU y una malograda cena con 4 mandatarios nórdicos en Nueva York, la cual fracasó.


“No firmar el Tratado de Escazú es una demostración concreta de la errática política exterior de @sebastianpinera”, sostiene una profesional que participó en la redacción del acuerdo, a la vez que señala que “con ello se busca cuestionar el sistema interamericano de integración”.
“Las decisiones que toma Salas Kantor son ilógicas, insiste en promover la figura de líder regional del presidente y competir con la estatura internacional de la expresidenta @MBachelet”, sostiene la fuente.


Pero también, agrega la profesional, “hay un miedo implícito, errado y conservador, que tiene como norte blindar al presidente de todo aquello concerniente a los DDHH, pues entiende, el segundo piso, que a partir de octubre se abrió un flanco que puede provocar algún daño”.
Según fuentes al interior de @MMAChile, lo que hace el segundo piso y en especial Benjamín Salas, es no comprender la diplomacia, “entendiendo que la presidencia de @COP25CL, al no firmar el tratado, será sólo algo decorativo”.


En el mismo ámbito, señalan que “la OCDE miraba con atención el proceso que llevábamos a cabo, entendiendo que no somos líderes medio ambientales como Costa Rica, sin embargo, todo esta forma de hacer política nos relega a un segundo y tercer plano”.


La profesional que participó en la redacción del acuerdo, sostiene que “el documento de 4 puntos que leyó @Allamand en el Congreso lo realizó el segundo piso, por eso no llevaba la firma de ningún profesional y sólo señaló la poca certeza jurídica, un eslogan que causa miedo”.


Los dardos que apuntan al asesor hijo de la exministra, como uno de los responsables de la negativa para firmar Escazú, es otro capítulo más de desavenencias que han derivado en fuertes críticas del oficialismo y de la oposición, por su poca experiencia.




Una de las críticas es su vinculación con el mundo progresista y su apoyo a diversas iniciativas legales adscritas a esa corriente, sin embargo, su pertenencia a este mundo en la @UCatolica, en específico a la Nueva Acción Universitaria, queda en entredicho por sus exmiembros.
“Lo que se hizo con el Acuerdo de Escazú fue muy dañino”, señala una fuente del @MMAChile. “Se perdió una gran oportunidad para ser un referente medioambiental, pero el presidente escuchó a su asesor y dio un paso atrás en el fortalecimiento de la democracia”.

